Cuántos cambios hay mes tras mes en el mundo tecnológico, comencemos por lo que acaba de ocurrir en septiembre, la presentación del nuevo iPhone y sistema operativo. Hay tantas utilidades que el sistema nuevo tiene, pero que no todos los usuarios Apple le ponen atención, muchos utilizan el celular para las redes sociales y es todo, pero ¿sabían que hay aplicaciones para aumentar la productividad? Ese será el primer tema de la editorial de hoy; por otro lado, quisiera platicar un poco sobre el juicio que se está teniendo por las criptomonedas, escándalo financiero dentro de Estados Unidos que afectaría globalmente.
Comencemos con el tema del nuevo iPhone, la generación 15, un excelente teléfono, que se está volviendo la herramienta esencial para trabajar, en muchos casos como Tiktokers, Influencers, creadores de contenido, entre otros. No descarto que hay otros trabajos que también lo utilizan a menudo y se vuelve una oficina su smartphone, pero ¿qué pasa con los que no lo necesitan para trabajar y solamente está bajando su productividad?
Bueno, a lo largo del tiempo, cualquier persona que utiliza un celular se podía distraer en el trabajo o en la escuela, lo primero que hacían era poner en vibración las notificaciones, de esta manera no te molestaba tanto. Después en modo silencio, lo cual solamente prendía la pantalla para mostrar la notificación sin emitir un sonido o vibración. Más adelante, los usuarios con smartphone comenzaron a voltear boca abajo el celular para no ver la pantalla encendida; con la tecnología más avanzada, Apple introdujo lo que es el modo “no molestar” para que no llegaran las notificaciones. Hasta hace 2 generaciones desarrollaron el modo “focus” para que el usuario pueda elegir las aplicaciones, de las cuales quiere recibir notificaciones, dependiendo de los horarios. Sin duda, una genialidad para administrar batería y uso del celular.
Sin embargo, la productividad seguía bajando y un gran número de personas se quejaban de lo mucho que distraen las redes sociales y aplicaciones de un teléfono inteligente. Entonces, nació la aplicación “Freedom” o libertad por su significado en español, la cual permite bloquear las aplicaciones, redes sociales y sitios web que pueden distraerte o hasta bloquear el acceso a internet. La aplicación te da oportunidad de programar el tiempo que quieras bloquear y tiene la funcionalidad “modo seguro” para no poder desbloquear nada hasta que termine el tiempo programado.
No solamente es esa aplicación, han desarrollado otras alternativas como ColdTurkey, FocusMe y Forest. Es normal el desarrollo de estas aplicaciones, se veía venir desde hace tiempo, no porque el usuario sea distraído, sino que las aplicaciones, entre ellas las redes sociales, son planeadas y desarrolladas con el fin de llamar tu atención.
Este nuevo modo se le dice “modo monje” y se refiere al modo de enfocarse a una sola tarea sin la distracción de tecnología, juegos o redes sociales y aumentar la productividad diaria. Grace Marshall, una asesora y autora de productividad, menciona que cada que recibimos una notificación, también recibimos una inyección de dopamina y como son mensajes o correos instantáneos, queremos también contestar y atender instantáneamente, sin embargo, no debería de ser así.
El creador de Freedom desarrolló esta aplicación por el simple hecho de que él mismo pasaba mucho tiempo en Facebook y otras redes sociales y no le dedicaba tiempo a su estudio, casi como enfrentar tecnología con tecnología. Vladimir Druts, el creador de FocusMe, afirma que el modo monje va a tener un crecimiento fuerte, ya que se necesitará para el incremento de productividad y para competir contra aplicaciones que busquen la atención del usuario. Además, menciona que reduce el nivel de adicción por el dispositivo, lo cual nadie le pone atención, al final del día, esto sigue siendo como una droga que no puedes dejar de usar por la misma dopamina que se genera.
Mi recomendación es que lo intenten, no de lleno, primero algunas horas, bloqueen su celular una hora y verán como aumenta su productividad en lo que sea que estén haciendo. Claro, hay que atender las llamadas importantes, pero para esto sirven las aplicaciones ya mencionadas, para programar lo importante y lo no importante.
Por otro lado, hay un juicio en contra del “rey de las criptomonedas” y quiero platicarles un poco, ya que no es tan sencillo el juicio, pero sí es un escándalo financiero en Estados Unidos que podría afectar a más países. Primero que nada, el juicio es contra Sam Bankman-Fried, nacido en Sillicon Valley y estudió en MIT y este vio las criptomonedas como un medio para hacer dinero y cambiar el mundo, según Michael Lewis, escritor del libro sobe Sam. Sam cofundó Alameda Research, un fondo de inversiones en criptomonedas, que según le estaba dando un millón de dólares diario. Finalmente, en el 2019 crea FTX.
FTX era un banco no regulado y permitía a los usuarios intercambiar dinero por criptomonedas y almacenarlos en la aplicación. En un punto, la aplicación tenía transacciones de 10 a 15 mil millones de dólares DIARIAS. El año pasado, la aplicación estaba valorada en 32 mil millones de dólares, pero tanto dinero empezó a causar ruido y Coindesk afirmó que las empresas de Sam se encontraban en una situación financiera de riesgo y más personas acusaban a FTX de que estaban utilizando los fondos de sus clientes de mala manera. Lo que pasó fue que los clientes sacaron miles de millones de dólares y la aplicación se declaró en bancarrota en noviembre del año pasado.
La acusación que tiene Sam es de causar uno de los mayores fraudes financieros en Estados unidos, utilizar los fondos de clientes para hacer crecer sus propias inversiones de ALMADA RESEARCH, la empresa creada en el 2017. Además, otras acusaciones de donar dinero a la política o comprarse lujos propios, entre otras acusaciones. Uno de los problemas más grandes es que casi un millón de usuarios no lograron sacar su dinero a tiempo y lo perdieron todo. Para acabarla de contar, algunos amigos ya se declararon culpables y todo esto apunta de que sería una sentencia de 115 años.
Una de las principales acusadas es la ex novia de Sam, la cual se declaró culpable de transacciones fraudulentas y testificará en contra de Sam, ya que Sam aprobó utilizar el dinero de los clientes de FTX para levantar Alameda. Lo más impresionante es que Sam se declara inocente de todas las acusaciones actuales y futuras, sí confirmó la situación financiera de riesgo que tenía, pero se niega a afirmar que robó fondos. Pero lo más probable es que lo declaren culpable y pase el resto de su vida en la cárcel. Tengan mucho cuidado al invertir en criptomonedas, no todo lo que se dice en las redes sociales es verdad, mejor activen el modo monje para no estar recibiendo notificaciones de aplicaciones que los distraen de lo importante.
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